Para millones de personas en todo el mundo, las bombas de insulina se han convertido en un salvavidas, ya que ofrecen una forma cómoda y eficaz de controlar la diabetes. Solo en los Estados Unidos, más de 350.000 pacientes diabéticos utilizan bombas de insulina. Sin embargo, estos dispositivos también conllevan un riesgo oculto: infecciones en el lugar de inserción. Estas infecciones, si no se tratan, pueden provocar complicaciones graves, como la hospitalización e incluso la amputación.
Prevalencia de infecciones en el sitio de la bomba
La prevalencia de infecciones en el sitio de la bomba varía en función de varios factores, entre ellos, el tiempo de uso de la bomba, la frecuencia de los cambios de sitio y los hábitos de limpieza de cada persona. El problema más frecuente de la bomba de insulina es la infección en el sitio del catéter. Según los estudios, entre el 10 % y el 32 % de los usuarios de la bomba tendrán infecciones en algún momento.
A estudiar publicado en la revista médica Tecnología y terapias para la diabetes Se ha informado de que las bombas de insulina están relacionadas con el desarrollo de eczema, cicatrices y lesiones, y se han observado complicaciones dermatológicas en uno de cada tres pacientes. Además, los problemas dermatológicos pueden perjudicar la absorción de insulina o incluso provocar la interrupción del tratamiento con una bomba de insulina.
Graves consecuencias de las infecciones no tratadas
Si bien la mayoría de las infecciones en el lugar de la bomba se pueden tratar con antibióticos, la intervención temprana es fundamental. Si no se tratan, estas infecciones pueden propagarse a los tejidos más profundos y provocar abscesos, celulitis y osteomielitis. Lauren Bongiorno habla de su historia de lucha contra dos infecciones en el lugar de la bomba que la obligaron a visitar la sala de emergencias y a ser hospitalizada durante tres días dos veces en dos años y medio. Destaca la importancia de un cuidado preciso del lugar y el costo emocional que pueden causar estas enfermedades. Haga clic aquí para ver la historia completa .
Estrategias de manejo para prevenir infecciones
Afortunadamente, hay varias medidas que puede tomar para minimizar el riesgo de infecciones en el lugar de la bomba:
- Mantener una higiene estricta: Lávese bien las manos con agua y jabón antes y después de insertar o cambiar el equipo de infusión. Limpie el lugar de inserción con alcohol antes de la inserción.
- Rotar los sitios de infusión: No reutilice el mismo sitio durante más de 3 a 5 días. Esto ayuda a evitar la acumulación de bacterias.
- Informe de inmediato a su proveedor de atención médica sobre cualquier inquietud que tenga: No dude en buscar atención médica si sospecha que tiene una infección.
- Monitorea tus sitios: Busque signos de infección, como enrojecimiento, hinchazón, dolor o supuración.
Gel para heridas diabéticas Lavior Se puede utilizar en la zona infectada para ayudar a prevenir que la infección empeore y, al mismo tiempo, proteger y curar el sitio de la bomba. Sus ingredientes naturales brindan resultados poderosos, aceleran la curación y minimizan las cicatrices.
haga clic aquí Para obtener más consejos y trucos para quienes usan la bomba de insulina
No dejes que tus heridas te frenen. Toma las riendas de tu curación con Gel para heridas diabéticas Lavior . ¡Pida el suyo hoy y vea la diferencia!
Fuentes:
Berg, AK, Nørgaard, K., Thyssen, JP, Zachariae, C., Hommel, E., Rytter, K. y Svensson, J. (2018). Problemas cutáneos asociados a bombas de insulina y sensores en adultos con diabetes tipo 1: un estudio transversal. Diabetes technology & therapeutics , 20 (7), 475-482.
Demir, G., Er, E., Atik Altınok, Y., Özen, S., Darcan, Ş. y Gökşen, D. (2022). Complicaciones locales de los sitios de administración de insulina y efecto sobre el manejo de la diabetes. Revista de enfermería clínica , 31 (17-18), 2530-2538.
McAdams, BH y Rizvi, AA (2016). Una descripción general de las bombas de insulina y los sensores de glucosa para el médico generalista. Journal of clinical medicine , 5 (1), 5.
Nowakowska, M., Jarosz-Chobot, P., y Polańska, J. (2007). Cepas bacterianas que colonizan catéteres subcutáneos de bombas de insulina personales. Revista polaca de microbiología , 56 (4), 239.